Los ángeles esperan por ti para que invoques su ayuda, sí, pero ellos no actúan hasta que tú no se lo pidas. Es una realidad muy hermosa saber que los brazos bondadosos del Padre se extienden de tal manera que se convierten en ángeles que vienen a apoyarnos, a ayudarnos, a llenar nuestra vida de más luz. Los ángeles están en todas partes, están prestos a recibir nuestras más sinceras peticiones, ellos conocen lo que hay en nuestros corazones, ellos están a la espera de nuestro llamado, pero son tan especiales que no se mueven a su antojo, sino bajo nuestro pedido, ya que respetan el libre albedrío de cada persona.

Si cada día recordáramos lo afortunados que somos, al tener la posibilidad de contar con muchas manos extras colaborando con nuestro despertar de consciencia, seríamos más dichosos, no existiría en nosotros la duda de que todo eso que creemos malo pasará porque nuestro Padre nunca nos deja solos. La tierra está llena de ángeles y están entre nosotros, los puedes también ver entre las personas que de repente aparecen en tu vida como si eso tan profundo que pedíamos o deseábamos alguien lo hubiera escuchado y, es tan cierto, que te puedes maravillar de sólo saberlo.

Mientras más energía positiva le inyectemos a nuestras vidas, más maravillas podemos ver, mientras más estemos prestos a ver la verdad, con más claridad y luz observaremos todo y eso que creíamos tan malo, resultó ser algo muy bueno, porque sólo quien cree crea cada día su hermosa realidad.

Entrégate a las cosas buenas que te trae la vida cada mañana, no trates de ver siempre lo malo en todo, a veces nos amargamos sólo con pensar en algo malo, cuando ni siquiera ha sucedido y quizás nunca sucederá. A veces resulta que aquello tan fatal resulta ser una bendición y fueron los ángeles quienes acudieron a ese llamado que desde lo más profundo de tu Ser le hiciste. Déjate llevar y sorpréndete con las maravillas del Creador y el poder de sus ángeles.

Hasta la próxima publicación…

Zuluan Orion