Desde el mismo momento de tu nacimiento naciste con trillones de células que se regeneran día a día para hacerte sentir que aún estás vivo. Mientras estás vivo entonces tienes el deber de alimentar tu Espíritu y, sobre todo, de perseguir tus sueños, que no deberían ser otros que aquellos que están unidos a tu propósito de vida.

La humanidad sufre mucho porque no se ha hecho consciente de su gran poder y su enorme ignorancia ante unas leyes universales que están a merced de sus deseos, no obstante hasta que esto no se reconozca seguirá viviendo como mendiga, sin saber que hay toda una fortuna esperando por ella.

Las personas que no tienen siquiera idea de lo que está ocurriendo en el mundo, con estos cambios planetarios, la ascensión y la evolución hacia otras dimensiones, puede que la estén “pasando bien”, porque a veces el desconocimiento las lleva a vivir una vida sin sentido, hasta que por ley universal, le toque a su puerta una adversidad tan fuerte que trastoque todos sus cimientos.

Sucede mucho cuando vemos a celebridades y atletas famosos, a quienes nunca les imaginamos una vida caótica, pues el brillo era la característica que los definía. La depresión toca más fuerte en esas personas porque se vieron obligados a vivir escondiendo todas sus debilidades y sus conflictos emocionales y hasta físicos, entonces pasa que un día no soportaron el peso y explotan, causando un gran revuelo porque nadie nunca creyó que esa persona millonaria, exitosa y aparentemente feliz, estaba atravesando por situaciones traumáticas.

En la medida que comencemos a reconocer el potencial interno que tenemos, nos hacemos fuertes de Espíritu y emocionalmente estables, porque dejamos que nuestro maestro interior tome el control de nuestras vidas, evitando que la negatividad, a la cual nos llevan tantos pensamientos, terminen por arruinar nuestras vidas.

Hay muchos ejemplos actuales de suicidios que nos obligan a estar cada día más conscientes de nuestros pensamientos y acciones, a vivir con la serenidad que nos toca en estos tiempos de mucha incertidumbre y, sobre todo, a revisar cómo están actuando nuestros hijos, nuestras parejas, familiares, amigos, pues cada uno está librando su batalla y debemos estar prestos a ayudar en la medida que podamos.

Hasta una próxima publicación…

Zuluan Orion