Seguro no es la primera vez que lees esta frase, cerrar ciclos es una de las tareas que más cuesta en el camino de la Realización. No basta con decir perdoné y algún día olvido todo lo malo que me hicieron, tienes que abandonar la idea del dolor que te causaron los traumas del pasado, sólo así podrás desprenderte de ese cúmulo de recuerdos y emociones que no te dejan vivir en paz.

Para cerrar ciclos se requiere de un trabajo interno diario, requiere viajar cada día a visitar a ese niña o niño interno que vive en ti y que está herido, hay que abrazarlo, hay que reafirmar su confianza, hay que prepararlo para las nuevas aventuras que se pueden vivir si hay un compromiso de dejar atrás todas esas heridas que dolieron mucho, pero que ya no necesitas en tu vida, hay que arriesgarse a encontrarse a sí mismo viviendo en alegría con la absoluta certeza de que sí se puede ser feliz en esta tierra. La único que te impedirá cerrar ciclos serán esos deseos inconscientes de quedarte en la amargura, en la indiferencia, en la victimización, en el dolor; debes tener deseos profundos de vivir una vida con calidad, con paz, con amor, llena de experiencias bonitas que llegarán a ti por atracción, porque luego de cerrar ciclos, se eleva la frecuencia de los sentimientos más sublimes, se desea simplemente vivir a plenitud.

No te dejes agobiar por las circunstancias de la vida, vive, vive intensamente, cerrando esos ciclos que te han mantenido en atadura, aprovecha este cierre de año para prometerte a ti mismo un cambio radical.

Hasta la próxima publicación…

Zuluan Orion