De mi libro “Transformación Cuántica”, les dedico esta importante reflexión. Aceptar que todo es posible es la manera de abrirnos a lo realizable, a aquello que nos llevará a vivir de una forma distinta el resto del tiempo que nos queda en el efímero paso por este mundo.

Sembraremos hoy lo que iremos cosechando en esta vida y las siguientes, por ello debemos asumir la responsabilidad de nuestros actos, transformada en dicha y dolor. Comprenderemos que nuestra forma de pensar y de sentir nos anima o desalienta, nos sana o nos enferma, nos transforma o nos bloquea. Al saber que no hay nada perverso tras nosotros, comprenderemos que nuestra alma vive aquello que eligió vivir porque necesitaba aprender una lección para madurar en su existencia espiritual y para aclarar todo lo que el dolor acumulado le ha nublado.

Por experiencia propia sé que el dolor puede separarnos de nuestra realidad; he sentido mi corazón contraerse, conozco el sufrimiento en cuerpo y alma, me ha abrasado con sus enfermedades, sus maltratos y agresiones; lo he padecido a nivel físico y verbal, originado por aquellos que debían amarme. Con la pérdida de nuestros seres queridos, con la pobreza material y espiritual, el dolor siempre es el mismo para todos.

Nos hemos dejado consumir por las exigencias sociales, creyendo que todo está fuera de nosotros, incluso Dios. Muchos de nosotros, provenientes de diferentes religiones, nos hemos separado conscientemente de Él, reduciendo nuestra existencia al trabajo, los compromisos, la rutina y el placer. Nos hundimos en la búsqueda de una felicidad basada en el disfrute de lo perecedero, como el dinero, la fama y el poder.

En mi país hay un sabio dicho que reza «Aquel que sube como palma, cae como coco». Así se explica nuestra caída cuando dedicamos nuestra existencia a lo efímero, siempre queriendo tener una mejor pareja, un trabajo mejor pagado, un carro más moderno; convencidos de que así es como funciona la vida y la vida es más que eso.

¿Te gustó esta reflexión? Te invito a leer este libro dedicado a todos quienes desean descubrirse y elevar su consciencia. Hasta la próxima publicación…

Zuluan Orion